Periodista del sur de Veracruz denuncia amenazas y coacción tras destapar actos de corrupción
Mari Carmen Alcalá Rosas, reportera y directora del medio Alcalá Notícias, interpuso una denuncia formal ante la Fiscalía Especializada en Delitos contra la Libertad de Expresión, señalando haber sido víctima de amenazas, coacción e intimidación tras publicar notas periodísticas que involucraban a Iván Raúl Palacios y Marcelino Marun, este último delegado de la sección 165 de músicos y agente municipal de Mapachapa, Minatitlán.
En su denuncia, Rosas Alcalá narra que los hechos iniciaron tras la publicación de una nota el 6 de enero de 2025, en la que se abordaba la elección pendiente de un nuevo secretario general para los músicos de la región, mencionando a Marun y Palacios.
Minutos después de la publicación, recibió llamadas intimidatorias de Marun, quien le exigió bajar la nota, así como mensajes en redes sociales en los que se refería a la periodista con expresiones despectivas, como “una tipeja… necesita un jalón de orejas”.
De acuerdo con la denunciante, Iván Raúl Palacios también intentó presionarla para modificar el contenido de la publicación, llegando a contactar a la pareja sentimental de la reportera con amenazas directas. Según Alcalá, en un mensaje de audio, Palacios advirtió: “Si ella no quita esa publicación hoy, voy a tener que hablar y ni pedos. Tú sabes que pedos conmigo”.
Posteriormente, recibió un mensaje amenazante de un sujeto identificado como “Comandante Pantera”, quien, a nombre de “el patrón”, advirtió que habría consecuencias si no se retiraba la nota. Las amenazas escalaron hasta incluir advertencias de daño a la familia de la periodista.
Rosas Alcalá subrayó que las publicaciones en Alcalá Noticias se basan en información de interés público y que su labor informativa no busca difamar, sino informar con veracidad. Además, solicitó medidas de protección para ella y su familia, así como una investigación exhaustiva para esclarecer los hechos y garantizar su seguridad.
La reportera llamó a las autoridades y a la sociedad a respaldar el ejercicio de la libertad de expresión, asegurando que las agresiones hacia los periodistas representan un ataque directo a la democracia y al derecho a la información.
El caso de Rosas Alcalá pone nuevamente sobre la mesa la vulnerabilidad de los comunicadores en Veracruz, estado considerado como uno de los más peligrosos para ejercer el periodismo en México.
